En Windows, las aplicaciones pueden seguir haciendo acciones incluso cuando no estén activamente en la ventana de la aplicación. Estas aplicaciones suelen denominarse aplicaciones en segundo plano. Puedes decidir qué aplicaciones y cuáles no, y así evitar la ejecución de aplicaciones en segundo plano consuman recursos de tu pc.
Aunque este término se emplea más en la telefonía móvil, la aplicaciones en segundo plano son aquellas que a pesar de que tú no las veas trabajar siguen consumiendo recursos de tu equipo. Te pongo un ejemplo. A la hora de escribir este post he abierto el administrador de tareas, he ido a la sección de Procesos y he descubierto 101.

Sabiendo esto, podemos actuar de dos maneras. Cambiar la configuración de como Windows gestiona este tipo de situaciones, desde las opciones de menú, o ir un poco más allá y realizarlo desde las políticas de administración de Windows.
Controlar qué aplicaciones se pueden ejecutar en el fondo.
- Selecciona Inicio y, a continuación, selecciona Configuración > privacidad >aplicaciones de fondo.
- En Aplicaciones en segundo plano, asegúrate de que Permitir que las aplicaciones se ejecuten en segundo plano esté Activado.
- En Elegir qué aplicaciones pueden ejecutarse en segundo plano, pase la configuración de aplicaciones y servicios individuales a Activado o Desactivado.
Así es como yo lo tengo configurado, ya que todos conocemos Windows y sabemos que alguna «se le escapará».

Impedir que todas las aplicaciones se ejecuten en segundo plano
Te enseño a configurar una directiva de Windows para que no se ejecuten aplicaciones en segundo plano nunca más.
- Pulsa la tecla Windows + R
- En ejecutar escribe: gpedit.msc
- Pulsa en la opción Plantillas Administrativas, correspondiente a la rama Configuración del equipo, del árbol Directiva de equipo local.
- Ahora abre Componentes de Windows y buscamos Privacidad de la aplicación.
- Se abrirá a la derecha un árbol con diferentes configuraciones, ve a la penúltima: Permitir que las aplicaciones de Windows se ejecuten en el fondo
- Haz doble clic, selecciona Habilitada
- Y en la sección de Opciones marca Forzar denegación. Si eliges la opción «Forzar denegación», las aplicaciones de Windows no podrán ejecutarse en el fondo.
Tras realizar este cambio solo nos queda reiniciar el ordenador o mucho más profesional si quieres será ejecutar el comando: gpupdate /force desde la consola de línea de comandos de Windows.
